jueves, 4 de febrero de 2010

Nuestra Guerra Fria

Hoy ha sido uno de esos días que te reactivan las sinapsis dormidas. Hoy he asistido a la conferencia sobre el sistema GNU y software libre que Richard Stallman daba en la UPV, colaborando en la grabación del evento. Y ha avivado en mi ciertos conceptos en los que llevo tiempo interesado.

Para quienes no lo sepan, Stallman es el creador del sistema operativo GNU, que da la base para la mayoría de software libre que se mueve ahora mismo por ahí. El famoso Linux es en realidad una aplicación que forma parte del mismo, desarrollada después, pero de algún modo se ha convertido en el termino que muchos usan para hablar de estos sistemas, cuando en realidad la base es el GNU. Seguramente los entendidos podrán dar una explicación mucho mas clara que yo, pero sirva esto como base de introducción.

Lo interesante de todo esto, más allá de la capacidad del hecho de ser sistemas de licencias gratuitas y que permiten un acceso total al código, es la filosofía sobre la que se sustenta. Una filosofía basada en la libertad de decisión, en el control personal de la privacidad y en la colaboración abierta. Estas ideas impregnan el movimiento que se halla detrás del software libre, pero en realidad son síntomas de algo mucho mayor.

Se ha dicho muchas veces que uno de los grandes problemas de nuestra generación es que no tenemos grandes causas por las que luchar. Es una frase que he crecido oyendo continuamente. Las grandes guerras, los grandes conflictos, las revoluciones contra el sistema... son todo cosa del pasado. Y a nosotros se nos ha dejado un mundo jodido y lleno de grises y sombras, sin enemigos evidentes a los que combatir. Pero la verdad es que ahora mismo estamos inmersos en un conflicto cuya principal característica es lo inocuo que parece. Hay una Guerra Fría ahí fuera, y el campo de batalla esta oculto a plena vista.

Esta Guerra tiene múltiples campos de batalla, cada uno de ellos en diferentes frentes, de diferentes formas, pero por motivos que en esencia son muy similares. El software libre, los derechos de autor, el acceso a la información, la libertad de expresión, la manipulación de los medios de comunicación, la influencia de la empresa privada en las decisiones legales... Nada de esto es casual, y todo forma parte de un mismo conflicto.

Pensad en la Sgae, y en su intento de controlar lo que puedes oír, ver, o decir. Y si intentas llevarles la contraria, defendiendo tus derechos, puede que acabes siendo victima de un ataque que puede arruinarte. Puede que pierdas tu trabajo, aun cuando no estas haciendo nada ilegal. Ha pasado.

Pensad en Amazon. Un negocio que ha crecido de manera desmesurada, y que ha realizado los movimientos necesarios para tratar de hacerse con el mercado. Que crea un aparato para leer libros electrónicos que solo ellos saben como funciona. Que desarrolla un nuevo modelo de ebook, solo utilizable en su Kindle, que ademas posee una licencia DRM, que básicamente te indica que tu no compras los libros, que los tienes prestados. Y olvidate de prestárselo a un amigo, o venderlo de segunda mano. Y cuidado que no pase nada y te lo borren de tu aparato. Ya ha pasado. En verano borraron las copias del libro de Orwell "1984" (véase el concepto Ironía) de los Kindle de los clientes que lo habían comprado. Nada por aquí, nada por alla.Pufff.

Pensad en las modificaciones las leyes que se están llevando a cabo en todo el mundo para tratar de mantener un modelo de negocio que se ha quedado obsoleto. El antiguo sistema ya no es valido, la nuevas tecnologías han abierto nuevas posibilidades y en lugar de mirar hacia delante, hacia la posibilidad de crear nuevos modelos sociales y económicos, las grandes empresas tratan de prolongar la vida de un sistema en decadencia. Y los gobiernos son sus herramientas para ello.

Pensad en Apple, con todos su aparatos monotarea, diseñados no para hacer, sino para ver. Son aparatos de consumo rápido, diseñados para tal cosa. Son bonitos, si, pero su función es simplificar las cosas, hacerlas mas fáciles. Si se usan con sabiduría, con inteligencia, son herramientas que pueden ayudar a innovar.

Pensad en la cantidad de información que, gracias a aparatos como móviles o fenómenos como las redes sociales, ha sido recopilada sobre sus usuarios. Existen mapas humanos de tendencias que se realizan mediante el seguimiento de los móviles. Las redes sociales te ponen en contacto con tus amigos, pero también aprovechan para averiguar todo lo que pueden sobre ti. Lo que te gusta y lo que no. Lo que haces o dejas de hacer...

Estamos en una era en la que existe potencial para hacer grandes cosas. Para crear discusión social, para desarrollar nuevas formas de trabajar y de avanzar. Acceso a la información abierta a todos. Sin embargo estamos en un mundo donde lo fácil, lo barato y lo rápido es lo que manda. Un mundo que ha sido llevado a ese punto a conciencia. Un mundo en el que pensar por uno mismo es a la vez un lujo y un peligro.

Y esa es nuestra gran guerra. La identidad, la libertad de información, las bases de una sociedad futura. Si nos dejamos manipular, corremos el riesgo de quedar atrapados. Historias fantásticas como las de "1984" y "Farenheit 451" ya no son tan fantásticas...

Son nuestro día a día...